El perfume gira en torno al pachuli, en una interpretación decadente y suntuosa. La apertura pone inmediatamente sobre la mesa las poderosas armas: un pachulí intenso, casi borracho, y el cuero. Es de alguna manera salvaje y despreocupado, peligrosamente vestido de cuero pero juguetón. La bajada se vuelve más suave y compleja, gracias a una mantequilla de iris sucia que hace que toda la atmósfera sea más suave e intrigante. No te dejes engañar por el iris, aquí no hay ningún romance: las hojas de tabaco se enrollan, la chaqueta de cuero se lanza finalmente a alguna parte, y el delicioso y tentador olor de la piel emerge finalmente.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.